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jueves, 4 de octubre de 2018

Secretos de Estado por Bitcoins: oficial de inteligencia francés vende información clasificada en la Deep Web.


El lado oscuro de Internet, Darknet, o simplemente Deep Web, es mundialmente famoso por ser el lugar donde se pueden conseguir cosas fuera de lo común e información a la que no se tiene acceso en la web superficial.

El problema: muchos de los sitios están relacionados con actividades ilícitas o son utilizados por criminales. Es por ello que un oficial de inteligencia francés lo consideró el lugar perfecto para vender nada más y nada menos que secretos de Estado del país.

Aunque la Deep Web puede ser utilizada tanto para el bien como para el mal, parece que este último aspecto es el que predomina en la web oscura. Por ejemplo, cuando se obtiene información de forma ilícita para ser vendida, la web oscura es el primer lugar donde la mayoría de los ladrones se establecen.

Esto incluye a un oficial de la Dirección General de la Seguridad Internacional (DGSI), quien está siendo procesado por vender información confidencial y secretos de Estado de Francia a cambio de Bitcoins.

El uso de la web profunda y de las monedas digitales para concretar este tipo de actividades es bastante popular, ya que ambas ofrecen anonimato a las personas, por lo que cometer delitos se hace más sencillo y atractivo para los criminales.

La agencia de inteligencia DGSI de Francia es la encargada de manejar temas clave para un país, como el contraespionaje, el antiterrorismo, la ciberdelincuencia y la vigilancia de grupos criminales. Es por ello que sus miembros tienen sumo cuidado con la protección de la información de la organización, ya que mucha de ella podría ser de interés para diversas organizaciones delictivas.

Cuando los servicios de inteligencia franceses se percataron de la filtración, no tardaron en abrir una investigación para rastrear el origen. Así fue como dieron con el oficial que la subió, quien fue apresado rápidamente antes que lograra desmantelar la red criminal que había estado investigando. Se presume que podría estar involucrado de alguna manera con los delitos cometidos en ese caso. Si es declarado culpable, podría enfrentar hasta siete años de cárcel.

Casos como estos no son nuevos. En otras oportunidades, miembros de equipos de investigación criminal han sido seducidos por “el lado oscuro” y terminan cometiendo delitos. Uno de los más famosos ocurrió durante la investigación de la Ruta de la Seda, donde dos agentes de la DEA, Shaun Bridges y Carl Force recurrieron al robo y extorsión.





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